Hoy vamos a preparar un rico y sencillo rape al horno que es muy
sencillo de preparar y con pocos ingredientes. Como veréis en la receta yo le
he puesto una guindilla, porque creo que le da un toque muy bueno, sin que
pique demasiado, pero si queréis la podéis suprimir. También el freír el pimentón
en el aceite de confitar los ajos y la guindilla es un toque estupendo. El rape
que yo he utilizado es fresco pero también suele vender las colas congeladas,
pero si podéis utilizar mejor el pescado fresco. Recordar decirle a vuestro
pescadero que le quite la telilla y la piel. El rape, también recibe el nombre de Pez sapo o pejesapo.
Pixín es el nombre con que se conoce el rape en Asturias. Viven en el fondo oceánico hasta más de 500 m.
Tiene cabeza y boca
grandes en relación con el cuerpo que es de forma cónica y más cilíndrico hacia
la cola. El rape blanco o rape
común se distribuye a lo largo de las costas europeas y de América del Norte.
Se arrastra por el fondo mediante el movimiento de sus aletas pectorales para
poder buscar alimento. Su carne es excepcional, compacta y muy sabrosa. Sólo se
come su cola, pero la cabeza se aprovecha para sopas y caldos, a los cuales le
transfiere un sabor incomparable.
INGREDIENTES:
- 1 Rape (2 k aproximadamente con cabeza)
- 200 ml Vino blanco
- 3 Patatas medianas
- 1 Cebolla
- 2 Tomates
- 4 Ajos
- 1 Guindilla
1 Cucharada de pimentón
- Aceite de oliva
- orégano
- Tomillo
- Pimienta molida
- Sal
- Chorrito de vinagre
PREPARACIÓN:
Lo primero que hacemos al
comprar nuestro rape es decirle a nuestro pescadero, que nos quite la cabeza y
nos deje la cola con la espina, aunque también nos puede quitar la espina y
dejar los dos lomos limpios, aunque yo creo que la espina le aporta jugosidad y
más sabor, también le comentamos que le quite la piel y la telilla que tiene.
Los huesos de la cabeza los aprovechamos para hacer un caldo y aprovecharlo para
otro plato que lo necesitemos (en mi caso una rica paella). Seguidamente pelamos
y picamos como si fueran para tortilla las tres patatas. Hacemos lo mismo con
la cebolla, la pelamos y la picamos en juliana.
Seguidamente ponemos aceite en
una sartén la llevamos al fuego añadimos las patatas y la cebolla picadas,
salamos un poquito y freímos como si fueran para hacer una tortilla, dejándolas
más bien un poquito enteras, una vez que estén fritas las retiramos del fuego y
dejamos escurrir bien todo el aceite (este aceite está limpio y lo podemos
utilizar para cualquier otro plato). Mientras tanto pelamos los 4 ajos partiéndolos
en láminas finas, también hidratamos con un poco de agua la guindilla y la partimos en aros.
Seguidamente ponemos un poquito de aceite en un cacito, añadimos las láminas de
los ajos y la guindilla en aros, llevamos al fuego al mínimo y dejamos confitarse
poco a poco hasta que veamos que empiezan los ajos a dorarse, pasado este
tiempo retiramos del fuego y dejamos escurrir bien todo el aceite y reservamos
para más adelante.
Seguidamente encendemos nuestro horno a 200º por arriba y
por abajo, para que se vaya precalentando. A continuación cogemos nuestra cola
de rape, le hacemos un corte a ambos lados de la espina, sin llegar al fondo
del todo. Seguidamente lo salpimentamos, le añadimos un poquito de tomillo y de
orégano molido.
A continuación ponemos en una fuente acta para el horno, las
patatas que teníamos escurriendo, formando una cama en toda la fuente. Lavamos
los tomates los cortamos en rodajas
finas, salamos un poquito, ponemos encima de las patatas, y le espolvoreamos un
poquito de orégano.
A continuación ponemos la cola de rape en la bandeja,
añadimos los 200 ml de vino blanco, sin
verterlo por encima del rape, y por encima del rape ponemos un chorrito de
aceite de oliva, metemos en el horno que ya estará precalentado a 200º, aproximadamente 18
minutos.
Mientras tanto ponemos un poquito de aceite (del que hemos confitado
el ajo y la guindilla), en una sartén llevamos al fuego, cuando este un poquito
caliente retiramos del fuego, añadimos la cucharada de pimentón, damos unas
vueltas sin que se queme y añadimos el chorrito de vinagre, reservando para más
adelante.
Una vez que nuestro rape este horneado, sacamos del horno, emplatamos
en la fuente donde lo vayamos a servir, poniendo las patas y el tomate en un
lado y al otro el rape, regamos el rape con
el aceite que hemos reservado con el pimentón y el vinagre y para finalizar le
ponemos por encima los chip de ajo con los aros de guindilla.
Con esto solo
queda llevar a la mesa y disfrutar de este rico y delicioso plato de pescado.
el rape de por si me encanta, pero con esa camita que le has hecho tiene que estar espectacular
ResponderEliminarSúper como siempre
ResponderEliminarbesos
abrazo afectuoso
Rosetta